Mi Historia
Con una trayectoria de una década como mecánico de élite, he forjado mi carrera en el arte de la precisión técnica, perfeccionando sistemas automotrices de marcas legendarias como **MV Agusta, Ducati, Bimota, Ferrari, Mercedes-Benz, Audi, Yamaha, Honda y Aprilia**. Mi experiencia con estas obras maestras de la ingeniería me ha dotado de una comprensión profunda de la mecánica de alta gama, una meticulosidad obsesiva por el detalle y una habilidad innata para resolver desafíos complejos con elegancia y eficacia bajo presión. Cada motor afinado, cada diagnóstico resuelto, ha sido un testimonio de mi compromiso con la excelencia.
Inspirado por la innovación, la constante evolución, el arte, la combinación hombre-máquina y guiado por mi devoción a Dios, he abrazado un punto de inflexión trascendental: la transición hacia el desarrollo de software, un campo donde la precisión del código converge con la innovación sin límites. En 42 Madrid, he perfeccionado mis habilidades en lenguajes como C, C++, Python y en la gestión de sistemas Unix, dominando el arte de la programación de bajo nivel y la optimización de algoritmos. Mi enfoque combina rigor técnico con creatividad, transformando desafíos en soluciones tan funcionales como elegantes.
Mi visión es clara: fusionar mi legado en la mecánica de lujo con la vanguardia del desarrollo de software, especializándome en sistemas embebidos para la industria automotriz. Aspiro a diseñar soluciones transformadoras —desde sistemas de diagnóstico inteligente hasta arquitecturas para vehículos conectados y autónomos— que eleven la experiencia de conducción a nuevas cumbres de perfección. Mi trabajo está impregnado de los mismos principios que guían mi vida: sofisticación, disciplina impecable y un compromiso inquebrantable con la calidad, inspirados por la ética bíblica y la búsqueda de la excelencia divina.
Como un reloj suizo o una sinfonía de Bach, cada línea de código que escribo refleja mi pasión por la precisión y mi reverencia por la creación. Mi apariencia impecable, mi amor por la música clásica barroca y mi fe inquebrantable en Dios son el fundamento de mi identidad, moldeando un profesional que no solo construye software, sino que crea experiencias de ingeniería dignas de las obras maestras de Ferrari o Maserati. Mi misión es clara: aportar al mundo del software la misma elegancia, funcionalidad y perfección que definen el ultra lujo automotriz.